El cultivo de algodón tiene un gran impacto en el medio ambiente debido a que es uno de los cultivos transgénicos que existen actualmente en la Argentina, junto con la soja y el maíz. Los químicos utilizados para su producción pueden contaminar suelos y ríos, también dañar la vida silvestre e impactar negativamente en los ecosistemas y los seres humanos. Para producir 1 kilo de algodón convencional se necesitan más de 20.000 litros de agua, que deriva en una pérdida de hábitats naturales de plantas, animales y peces.
Es importante destacar que los pesticidas utilizados en la producción no solo son muy tóxicos para el medio ambiente, sino que también son extremadamente duraderos. Por lo tanto, es probable que los discos o toallitas de algodón que compramos en la farmacia o supermercados tengan residuos de pesticidas dañinos con toxinas que pueden ingresar al cuerpo a través de la piel, afectando a las personas que los utilizan.
A su vez, para prevenir el crecimiento de bacterias y moho en estos productos, se requiere la utilización de grandes cantidades de conservantes como por ejemplo los parabenos. Estos ingredientes, que casualmente se encuentran en los cosméticos que utilizamos diariamente, son tóxicos y cancerígenos para la vida humana, silvestre y marítima.
Como si fuera poco, cada año se tiran alrededor de 3.4 billones de kilos de toallitas y discos desmaquillantes de algodón a la basura, que para descomponerse tardan aproximadamente 100 años. ¿Sabes por qué? Por el plástico. Muchos discos de algodón no son en realidad de dicho material, sino de fibras sintéticas: plástico de un solo uso, que es el que se utiliza una sola vez y se desecha. Por las razones mencionadas anteriormente, se puede afirmar que estos residuos influyen notablemente en la cantidad de residuos urbanos que contaminan el ambiente.
Vivimos en un mundo en donde algunas cosas no se pueden manejar ni controlar pero, ¿podemos hacer algo al respecto con esta situación?. Los pads de algodón llegaron como una excelente solución a este gran problema debido a que son 100% biodegradables, es decir, no contaminan, y a su vez son suaves en la piel, ultra absorbentes, hipo alergénicos y reutilizables. Lo fundamental es que están hechos con algodón sin cloro ni fragancias. Se pueden utilizar para aplicar tónicos faciales, como toallitas desmaquillantes y para aplicar otros productos de la rutina facial. Sin embargo, cada vez son más las personas que eligen usar los pads reutilizables de tela, para no generar tantos desechos.
Con un consumo responsable y consciente podemos reducir en gran cantidad los residuos plásticos generados y así disminuir su huella de carbono en el planeta. Seamos el cambio que queremos ver en el mundo.