Es indudable que lo primero que asociamos a Yoko Ono es su matrimonio con John Lennon, ex Beatle. Sin embargo, es una artista cuya producción es amplia y variada.
Siempre hay un mensaje, siempre hay una intención. Y es que de eso se ha tratado la obra de esta artista. Una interacción de sus obras con el lugar y sus asistentes. Con la vigencia para descolocar a los que asisten a sus exposiciones, invitándolos a completar sus producciones. Yoko Ono silba bajito, pero de manera constante desde los sesenta hasta hoy.
Instrucciones para pintar -1962-
Yoko y el movimiento conceptual trataban al medio y al producto final como parte de lo mismo: arte. En este trabajo nos da instrucciones sencillas para ponernos en marcha y hacer una actividad.
“Cut Piece” -1964-
Aquí Ono se sentó en medio de un salón, vestida de forma elegante y con unas tijeras frente a ella. Luego, se le dio instrucciones a los presentes de cortar partes de su vestido y quedarse con ese pedazo.
La obra daba fin en el momento que la artista lo solicitase.
¿Qué buscaba Yoko? Una suerte de experimentación del sujeto con la obra de arte: Ella misma.
Season of Glass -álbum 1981-
El quinto álbum musical de Yoko está cargado de catarsis y de la resiliencia en materia viva. Una suerte de disco terapéutico para la japonesa, luego del asesinato de Lennon.