Aprender nuevos idiomas podría resultar mucho más fácil en el futuro, según un estudio científico.
En un estudio publicado en la revista Science of Learning, los investigadores demostraron que pequeñas cantidades de estimulación eléctrica a través de audífonos especialmente diseñados mejoraron la capacidad de los participantes adultos para reconocer los tonos de idiomas extranjeros, un efecto que duró después de que se detuvo la estimulación.
Al estimular el nervio vago con los audífonos, el grupo pudo identificar y distinguir mejor entre cuatro tonos de chino mandarín diferentes, como informa Inverse. Un resultado impresionante, ya que diferenciar entre esos cuatro tonos comunes es extremadamente difícil para los hablantes nativos de inglés que no están acostumbrados a los idiomas tonales.
En general, se observó una mejora del 13% en la distinción de un par de tonos de mandarín, dentro de los más fáciles de distinguir, en comparación con aquellos que no recibieron estimulación cerebral, aunque el efecto fue casi imperceptible en tonos más difíciles.
"Demostrar que la estimulación nerviosa periférica no invasiva puede facilitar el aprendizaje del lenguaje abre potencialmente la puerta a la mejora del rendimiento cognitivo en una amplia gama de dominios", dijo en un comunicado Fernando Llanos, investigador postdoctoral del Sound Brain Lab de la Universidad de Pittsburg y autor principal del estudio. El mismo efecto podría generalizarse al aprender patrones de sonido de otros idiomas según los investigadores.
"En general, la gente tiende a desanimarse por lo difícil que puede ser el aprendizaje de idiomas, pero si pudieras darle a alguien entre un 13% y un 15% de mejores resultados después de su primera sesión, tal vez sería más probable que quisieran continuar", dijo Matthew Leonard, profesor asistente de cirugía neurológica en la Universidad de California en San Francisco y coautor del estudio.
Los científicos ahora están investigando si extender las sesiones de aprendizaje con estimulación podría mejorar el efecto de los tonos más difíciles de distinguir.
La estimulación cerebral similar de la misma área, el nervio vago, se ha utilizado para tratar la epilepsia en el pasado y ahora es objeto de otros estudios que investigan si podría ayudar a tratar la depresión o incluso enfermedades inflamatorias. Sin embargo, estos tratamientos tienden a ser mucho más invasivos en comparación con los auriculares no invasivos utilizados durante este estudio en particular.
"Estamos mostrando efectos de aprendizaje sólidos de una manera completamente no invasiva y segura, lo que potencialmente hace que la tecnología sea escalable a una gama más amplia de aplicaciones médicas y de consumo, como la rehabilitación después de un accidente cerebrovascular", dijo el autor principal Bharath Chandrasekaran, profesor y vicepresidente de investigación en la Facultad de Ciencias de la Salud y Rehabilitación de la Universidad de Pittsburgh.