Reto Mundial : Julio sin plásticos
Durante todo el mes de julio se desarrolla la campaña Julio sin plástico o Plastic Free July, donde personas de todo el mundo se unen en el reto de vivir un mes sin residuos. La particularidad de ese año es la coyuntura particular del mundo: la pandemia sanitaria por covid-19. Por lo tanto, al tener que permanecer encerrados en nuestras casas, el consumo se elevó y dio como resultado mayo cantidad de plásticos que en otros momentos. No obstante, es importante tomarse la campaña con responsabilidad y, aunque sea, intentarlo. Se puede elegir hacerlo solo un día, una semana o todo el mes.
La iniciativa comenzó en 2011 por el equipo Earth Carers Waste Education. Su cofundadora Rebecca Prince-Ruiz, realizó numerosos trabajos de investigación sobre los problemas de los residuos plásticos y la contaminación oceánica. Dentro de los mismos, visitó numerosas plantas de reciclaje y allí fue cuando se dio cuenta del grave problema de los residuos. Había una gran cantidad de desechos plásticos y observó una gran dificultad en el proceso de separación, clasificación y transporte hacia los centros de reciclaje. Entonces, reciclar no es la única opción y separar la basura en nuestros hogares no es suficiente. La verdadera solución de este gran problema está en evitar que el plástico se convierta en basura. Y en esto podemos colaborar todos los consumidores, modificando nuestros hábitos de consumo.
Consecuentemente, el programa dio a conocer los 7 puntos básicos a seguir para lograr el objetivo final con éxito:
- Detectar el tipo de plástico que más consumís: productos de limpieza, higiene, comida. En este punto hay que analizar tu basura, ser consciente de cuanto plástico utilizás.
- Leer, preguntar, educarse. Se puede buscar información en libros, blogs, redes sociales.
- Buscar alternativas: tal vez lo podés remplazar por un producto sin plástico, hacerlo vos mismo en casa o directamente prescindir de ese producto.
- Prepararte: antes de que empiece Julio prepará un kit para ir a hacer las compras con bolsas de tela, frascos. Y uno para viajar o comer fuera de casa con alguna botella reutilizable, cubiertos, tuppers.
- ¡Más mercado y menos supermercado! Los mercados y negocios pequeños, en general, son mucho más amigables con el medio ambiente. Además, comprando productos frescos evitarás muchos plásticos y embalajes innecesarios como sucede en las góndolas de verdura de los hipermercados.
- Aprendé a decir no a la bolsa de plástico, al sorbete y a las cosas “gratis” que vienen en plástico. Antes de pedir una bebida en un restaurante, preguntá si la botella es de plástico e indicá al mozo que no querés sorbete.
- Denunciá: si no encontrás opciones sin plástico, hacé que tu queja y tu preocupación lleguen a oídos del culpable. Transformá tu queja en un reclamo público.
Esta campaña se convirtió en un movimiento global que promueve a que millones de personas colaboren de manera activa a reducir la contaminación por plásticos. Se trata de un trabajo en conjunto para conseguir un planeta más limpio. ¿Te animás a intentarlo?